Feminicidios y psicoanálisis. De lo político a lo subjetivo

Resumen

El psicoanálisis no tiene un dominio directo del fenómeno de los feminicidios. Puede únicamente hablar de ellos si su discurso no lleva a cabo una psicologización o metapsicologización de los procesos individuales (narcisismo, negación de la otredad, pulsión de dominio, etcétera), sino más bien intenta entender las relaciones inter-individuales que le son específicas a estos fenómenos y el tipo de enlaces libidinales que los caracterizan. Este enfoque implica confiar en las contribuciones de la sociología, la antropología y otros campos que estudian lo colectivo. Los femenicidios no son prácticas aisladas o aberrantes: ocurren dentro de un sistema de sexo/género particularmente opresivo, del cual proceden y al cual refuerzan. En consecuencia, no dependende del psicoanálisis sostener un discurso explicativo sobre los feminicidios: no es el psicoanálisis el que cuestiona los feminicidios, sino, por el contrario, este fenómeno social es el que dirige al psicoanálisis la pregunta acerca del efecto de las normas de género sobre la subjetivación, y también sobre la teoría analítica. ¿Qué pueden revelar los feminicidios sobre el psicoanálisis como aproximación clínica y teoría usada para dar un recuento sobre este fenómeno social trágico? Para establecer ciertos elementos de respuesta, se debe primero llevar a cabo una arqueología y una geneaología de la noción de feminicidio, y después abordar la forma en que puede ésta transformar la teorización analítica.